Reiki es una palabra japonesa y se pronuncia igual que se escribe, y donde “Rei” significa energía universal, que otorga la vida. Es omnisciente una especie de conciencia universal.”Ki” significa fuerza vital o fuerza que fluye a través de todos los seres vivos. También es conocido como la luz, el Prana, el Chi, la energía cósmica o la energía radiante universal.
El reiki puede ser utilizado en todas las situaciones. Nos ayuda a volver a nuestro estado inicial, a nuestra memoria celular libre de estrés y equilibrada.
Es un sistema seguro que puede aplicarse en cualquier momento, y a cualquier persona de distinta religión, filosofía y edad. Es un método terapéutico natural, del cual todo el mundo puede beneficiarse. Una vez que el practicante de reiki es iniciado podrá transmitir energía reiki a través de sus manos, que fluirá de una forma natural y fácil. Todos tenemos esa energía al nacer, la práctica del reiki nos ayuda a estar en un estado de armoniosa conciencia. En ese estado nos encontramos en un momento de amor y sanación.
En el reiki no es necesario involucrarse en el proceso de armonización, porque no se transmite la propia energía. La energía del universo fluye a través de la imposición de manos, sobre uno mismo o sobre otra persona. El reiki armoniza y equilibra, pero no se realiza diagnóstico, sólo apreciamos que el organismo se encuentra en un estado de equilibrio o no. Va directo a la causa, actúa tanto en los aspectos emocional, como físico y mental, de forma holística e integrativa del individuo.
Se transmite desde el amor incondicional del universo, y este amor nos devuelve al estado de paz y armonía original, nos conecta con la realidad de nuestro ser.
Las personas que transmiten el reiki son sólo instrumentos de esta energía. La persona que recibe esta energía comprueba como se acerca más a un estado de bienestar. Cuanto más se práctica se obtienen mayores beneficios. Al potenciar la energía vital, se equilibran los chakras, las capas aurales y los cuerpos sutiles.
El reiki te da las herramientas para conectarte a la energía universal a través de tu Yo superior para en primer lugar sanarte tú y luego ayudar a los demás.
Los resultados se perciben desde el primer momento, no hace falta nada especial, y de las distintas sintonizaciones se producen los ajustes para transmitir la energía reiki. Se abren los canales energéticos y se liberan los bloqueos, para que el paso de la energía universal fluya de forma ilimitada. Las iniciaciones nos ayudan a estar en contacto con la fuente de energía universal, aumentando con cada grado nuestra capacidad para transmitirla y también aumenta nuestra energía vital y nuestra vibración. Nos abre a dar y recibir.
Tiene gran importancia transmitir energía reiki sin expectativas, el receptor está en su proceso personal y administrará estos resultados dentro del marco de lo que esté viviendo o no. A su vez nos ayuda a integrarnos en nuestro propio proceso evolutivo personal y todo lo que avanzamos a nivel personal, se transmite al universo. Es parte del maravilloso ciclo del amor incondicional que nos retroalimenta y nos hace avanzar en nuestro camino hacia la luz subiendo nuestra frecuencia vibracional. Cada persona es libre de elegir, pero si elige tomar las riendas de su vida, conseguirá liberar el miedo, el odio, la tristeza y ser Artífice de su propia vida. Desde la consciencia no cabe echarle la culpa a los demás, somos responsables de nuestra propia armonía y de cómo vivimos los obstáculos del día a día.
Desde mi experiencia y trás muchos años de estudios he obtenido mi maestría de Reiki en monasterio budista, y he estudiado el reiki Usui, Karuna, Tibetano, Angélico, Atlante, Egipcio, que pongo a tu disposición para ayudarte mediante esta terapia. Si por el contrario estás interesado en el curso, puedes verlo aquí.
Spanish